“La propiedad del Valencia debe cumplir con la ciudad”

Insistimos en mezclar al máximo accionista con el club, y eso, al margen de no ser así, es una excusa para demasiadas cosas

Toni Hernández | 27 JUN. 2024 | 00:01
Nuevo Mestalla

“Que Peter Lim no recupere beneficios urbanísticos, si no hay a cambio una puesta en marcha de las obras muy importante”. Las palabras son de la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, y con todo el respeto del mundo hacia alguien a quien tengo en estima, le diré que no, que no es así, que estamos llamando a la parte por el todo, y que quien no recupera los beneficios urbanísticos no es el máximo accionista, sino el club”.

Entiendo que ese razonamiento, que es así, genera un desgaste grande en quien lo hace, porque nadie esta dispuesto a asociar sus palabras a cargar contra el club, y que el “comodín” de Meriton viene muy bien, pero hay que ser precisos, siempre y más en esto, con las cosas que se dicen.

En lo que sí le voy a dar la razón a Catalá, porque la tiene, es en que “lo que estamos haciendo es trabajar con los técnicos municipales para que nos ayuden a que se garantice absolutamente la posición del Ayuntamiento con respecto de la propiedad del Valencia. ¿Por qué? Porque la propiedad del Valencia tiene que cumplir con la ciudad.

Para mí, es importante que se haga el polideportivo de Benicalap. Para mí, es importante, muy, muy importante que se haga el Nou Mestalla. No puede ser que esta ciudad siga teniendo uno de los accesos principales con esa sensación de abandono que generan las obras paradas. Ahora bien, quien pone que el 3 de agosto caduca la ATE y pone que se quedaba en vigor el plan anterior a 2015, es el gobierno autonómico de Ximo Puig”. 

Con una salvedad importante, un matiz clave y que pasa siempre por alto, y que está en el debe del Valencia: “tenemos que hacer todo lo posible para que no se recuperen los beneficios urbanísticos, si no hay a cambio la puesta en marcha de las obras muy importante”. Como vengo diciendo  mucho tiempo, aquí todo el mundo sabe lo que hay que hacer, cómo y cuándo. Ahora “sólo” falta que se haga.