Baraja merece actuaciones concretas en la planificación

Ha empezado la cuenta atrás y el Valencia volverá al trabajo en pocos días. De momento las novedades se han centrado en el fichaje de Dimitrievski, el adiós de los cedidos y varias renovaciones que eran prioritarias. Entre ellas la del técnico, Baraja ya sabe que su futuro estará ligado al club pero merece un proyecto serio, ser escuchado y sobre todo no recibir sorpresas.

Los Juegos Olímpicos y algunas lesiones dejarán tocado al equipo en el inicio de la pretemporada. Tampoco estará el gran protagonista de las últimas semanas, Mamardashvili se ha despedido de la Euro dejando una buena imagen y nadie sabe si volverá a la ciudad como futbolista del club. De momento no se ha concretado ninguna de las ofertas y es precisamente en su persona en quién centramos esta opinión. El Valencia debe decidir si es el año de vender al georgiano o apostar definitivamente por él como portero de la próxima temporada.

Lo intolerable sería que al margen de la lentitud del mercado en cuanto a fichajes el técnico del Valencia se llevara sorpresas desagradables de última hora en forma de ventas. No sería la primera vez y de nuevo significaría una declaración de intenciones y poca confianza en el proyecto deportivo.