El árbitro mata al Valencia en Barcelona

Si nos llegan a decir que el Valencia iba a Barcelona, en la jornada 33, a luchar por Europa, nadie lo hubiera creído. Pero los de Baraja han hecho un gran año, y esa es el premio. El Pipo veía cómo se le caían Foulquier y Fran Pérez, y luego dejaba a Cenk en el banquillo dando paso a Yarek. Un once con una media de edad de 21,9 años, como apuntaba Fran Guaita. Los primeros compases dejaron claro lo que venía: ellos monopolizando la pelota, nosotros a defender buscando contras. Y en el 13, estuvimos a punto de hacer daño de la verdad, con una buena jugada de Peter por la derecha, llegando a linea de fondo, que remataba Duro en el primer palo y detenía muy bien Stegen. Y en el 19, otra muy clara también a la contra, con saque largo de Mamardashvili a Federico, mano a mano contra el portero, pero que no resolvía bien. Y como suele pasar, si perdonas lo pagas, y contra estos equipos, más. En el 21, jugada de Cancelo, centro al área de Raphinha, y Fermín remataba solo para hacer el 1-0. Era el primer disparo a puerta del Barcelona. Y en el 26, en un partido de locura, Hugo Duro luchaba un balón con todo, fallaba Stegen, y el madrileño se quedaba solo delante de la meta local para hacer el empate.

Ponía justicia, porque el encuentro no era del Barcelona aunque hubiera marcado primero. Estábamos bien y anulando el juego de los de Xavi, en su casa, que no es fácil, aunque pasada la media hora era obvio que quedaba mucho por remar. Mucho. En el 36, otro error de la zaga local, Federico ganaba la espalda a Araujo, el central del Barcelona lo arrasaba… y el colegiado señalaba penalti. Pepelu marcaba, y el equipo le daba la vuelta al encuentro para locura de los 300 valencianistas que había en Montjuic. En el 43, Cancelo hacía una gran jugada por la izquierda, con zapatazo al palo corto, que Mamardashvili paraba con une enorme intervención. En ese córner, el remate de la jugaba terminaba en el palo visitante en una jugada muy extraña. Pero en el 47, un error de Mamardashvili en una salida muy sencilla, terminaba con el balón en su mano, clara, era el último, y el VAR lo mandaba con roja al vestuario. Su puesto lo ocupaba Jaume, que debutaba en este Liga. Almeida era el que se iba del campo. Y en la falta que originó la roja, Jaume hacía une enorme parada. Se llegaba al descanso con un partido muy raro, en el que íbamos ganando, pero con todo abierto.

La segunda parte empezaba sin cambios y con un posible penalti a favor del Valencia que ni el árbitro ni el VAR tenía mucha voluntad de pitar… El equipo debía tener personalidad para que no se lo comiera el Barcelona, eso era básico. La salida local fue a por todas, intentando empatar cuanto antes. Y lo conseguían en el 49 en un saque de córner, aunque el remate de Lewandoski parecía dejar a Fermín en fuera de juego. Era muy claro, pero la cosa parecía claro que iba a cambiar de forma radical. El equipo no se iba a rendir, aunque en el 56 todo apuntaba a derrota, y lejos de encerrarse, seguía jugando su partido, a su estilo. En el 69, Baraja hacía cambios, metiendo a Guillamón y Marí, y sacando del campo a Duro y Guerra. En el 72, Jaume hacía una gran parada, el equipo montaba una contra letal, con Diego López mano a mano con Stegen… pero le sobraban dos metros para poder rematar bien.

Muy clara. Ellos seguían llegando, las seguían teniendo, y lo cierto es su tanto rondaba, pero había que seguir peleando. En el 77, dos cambios más, cuando entraban Canós y Cenk, y salían Diego López, desfondado, y Peter Federico, que hizo un buen partido. Y en el 81, en otro córner, de nuevo Lewandoski era el más listo en el área y hacía el 3-2. El partido ahí bajó, de hecho pareció morir, porque ni ellos parecían poder más, ni nosotros tampoco. El partido se terminó del todo en el 92, con un gol de falta, de nuevo del polaco, que resolvió el encuentro en la segunda mitad.